Al analizar las tensas relaciones entre producción cultural, capitalismo y ciertas ideologías actuales, Carlos Granés ofrece un certero diagnóstico del presente y una original mirada al arte contemporáneo. «La gracia del arte radica en que es la actividad libre por excelencia. Pero esta actividad libérrima y creativa ha sido rondada permanentemente por dos amantes peligrosas. La política y el capitalismo han tratado de multiplicar sus fuerzas fundiéndose con ella.» Comerciantes de arte roban paredes y puertas con obras de Banksy, un festival erótico disecciona los males políticos de España para estimular el consumo de pornografía, un autobús tránsfobo hace las veces de instalación itinerante, se estetiza el espacio público en Cataluña para hacer invisible al adversario... En los últimos años la cultura ha trabado una relación asfixiante con el capitalismo y con la política. Pareciera que el destino de toda expresión artística es acabar convertida en una mercancía cultural, en un incentivo para el turismo o en un arma estratégica en las batallas ideológicas. Este estupendo ensayo examina las tensiones entre la cultura, el mercado y el populismo contemporáneo. Carlos Granés ofrece un certero diagnóstico del presente y nos muestra con contundentes ejemplos el modo en que, paradójicamente, mientras el arte se vuelve políticamente correcto y renuncia a las estrategias de la vanguardia, la política opta por tácticas transgresoras y escandalosas para captarla atención del otro.
- Libro Impreso
- Editorial: Taurus
- Autor: Granés, Carlos
- N° Pag: 204