La paradojalidad, ligada a la clínica de los trastornos del pensamiento, se ha convertido en una cuestión crucial del campo psicoanalítico. El autor examina con rigor crítico la introducción de la paradojalidad en psicología y estudia el aporte de los pragmáticos de la comunicación, la escuela de Palo Alto. Para la consideración psicoanalítica de la paradoja, la referencia central es la obra de Winnicott, ya que la noción de transicionalidad requiere de manera explícita la tolerancia hacia la paradoja como una necesidad intrínseca de los procesos maduracionales. René Roussillon reafirma el papel fundante del otro, del objeto, en la estructuración del yo, y considera que la clínica conduce a no situar la patogeneidad de la paradoja en una suerte de mecanismo, sino a ubicarla en el conjunto estructural histórico y sincrónico. Capítulos posteriores del libro se centran en formas cruciales de la paradojalidad y en situaciones clínicas extremas. Esta doble secuencia es el puntal en el que se sostiene el proyecto central de esta obra, de articular paradojas con situaciones fronterizas.
