Hay libros que te mueven el piso, que te mantienen con la sensibilidad a flor de piel y te hacen llorar aunque te resistas. Pero hay otros, muy pocos, que te vuelan la cabeza, que te mantienen en una angustia constante y una desesperación por querer saber más, así es SADIE…

Desde las primeras páginas te absorbe, te engancha, hace que tu corazón se acelere, te transmite la necesidad de proteger de alguna manera a LAS CHICAS, Sadie y la pequeña Mattie.

La mayor introducción la encontramos en la sinopsis, Mattie, la hermana de Sadie ha sido asesinada de una forma brutal y desgarradora cuando tan solo tenía 13 años y Sadie ha desaparecido días después, por lo que no voy a mentirles, esta será una historia muy impactante, llena de dolor y sufrimiento. Espero que no me malinterpreten, tampoco pretendo que esto los asuste, pero si es importante que se preparen para una historia escalofriante. La verdad es que la historia esta tan bien estructurada, sigue la secuencia de los acontecimientos de una manera perfecta por lo que en ningún momento le perderás el hilo aun cuando es contada a través de Sadie y West McRay, un locutor de un podcast que ha sido comisionado por su jefe a investigar la historia de las chicas.

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En cuanto a la manera de narrar, me pareció muy original y acertada la forma en que incluyeron las transmisiones del podscast, pues eso le da el toque que nos transporta al aquí y ahora de la era digital. Otro de los puntos por los que disfrute la sesión del podcast es porque nos presenta la manera de desenvolverse y sobre todo de pensar de los personajes secundarios, y que aunque pareciera que no tendrán un papel significativo, todos y cada uno de ellos son esenciales para que se sepa gran parte de la verdad sobre lo que le sucedió a las chicas.

Al analizar la historia, la forma en que se negaban a investigar la desaparición de una adolescente por el simple hecho de pensar que huyo de casa sin ningún fin más que el libertinaje no hace más que confirmar lo mal enfocados que estamos como sociedad, pues no ponemos atención a los focos rojos… Ningún adolescente que este bien en su casa, que todo su entorno fluya sin dificultades va a querer irse así como así; aunque nos neguemos a verlo, la mayoría de las veces sufren abuso, incomprensión, desatención de sus necesidades básicas o incluso golpes, sin olvidar la falta de atención a su estado de ánimo, a ese proceso que todos los adultos alguna vez pasamos y que se vuelve tan vital a como nos iremos forjando en la adultez, los jóvenes necesitan mucha orientación y no buscan ser juzgados, por lo que desde este punto de vista, la manera en la que minimizan la desaparición de cualquier adolescente es también un foco rojo al que prestarle muchísima atención.

Otro de los temas muy importantes con los que nos encontraremos son las adicciones a las drogas y como el hecho de que un miembro de la familia sea adicto influye en toda la dinámica familiar. Quisiera de verdad decirles que este será el último ingrediente en la trama, pero no es así, hay mucho más y más impactante. Pero si todo esto no es suficiente, nos encontraremos con un final poco convencional en los libros pero muy frecuente en la vida real.

Este libro en definitiva nos dejara una gran reflexión, nos hará estar alertas a nuestro entorno y sobre todo al entorno de los más pequeños, nos mostrara todo lo que está dispuesta a hacer una chica con tal de cuidar la integridad y el bienestar de su hermanita sin importa si eso significa minimizar aún más su propia existencia. Sadie duele y duele mucho por lo que es digno de admiración que alguien se atreva a escribir sobre estas historias y darle voz a muchas chicas del mundo…

Por Vian Jaime 🖤

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