Reseña del editor
Leer hoy a Maquiavelo no es un anacronismo. No sólo porque se lo considera uno de los fundadores de la moderna teoría política, sino porque la realidad sigue dando la razón a sus análisis de la acción política. La tentación de conservar el poder a cualquier precio no fue exclusiva de los príncipes renacentistas. Los gobiernos democráticos también son alcanzados por el deseo de un poder sin límites y total. Situación ésta que hace inevitable una reflexión sobre el lugar del poder en la institución social, pues no cabe reducirlo a mero instrumento sin que se resienta su legitimidad ni es posible desprenderse de él sin que las sociedades humanas queden expuestas a la autodestrucción. Lefort se enfrenta a esta paradoja, pasando por algunas de las interpretaciones ejemplares del pensamiento de Maquiavelo (Antonio Gramsci, Leo Strauss) y procediendo a una nueva lectura de su obra, dejándose guiar por su discurso y atendiendo a la experiencia de lo político que movilizan sus principales textos (El Príncipe, los Discorsi). La presente edición se completa con una conversación inédita con Lefort acerca de «la Ciudad dividida y el sentido del republicanismo», donde éste expone sus reflexiones más recientes sobre la importancia de Maquiavelo para comprender las sociedades políticas democráticas.
Biografía del autor
Filósofo francés. Director de estudios emérito de la École des Hautes Études en Sciences Sociales de París (1975-1989), fue colaboradorde Les Temps modernes, que abandonó tras una polémica con Sartre. Cofundador, junto a Cornelius Castoriadis, de la revista Socialisme ou Barbarie (1949), dejará el proyecto en 1958, después de volver sobre su compromiso con el marxismo. Participará también en la dirección de las revistas Textures (1971-1975), Libre (1976-1980), Le Temps de la Réflexion (1981-1982) y Passé Présent (1982-1985), siendo más recientemente asiduo colaborador de otra revista, Esprit.