Es época de pandemia, un virus tremendamente contagioso y mortal ha acabado con la mayor parte de la población humana. Manuel y Lara, los dos únicos supervivientes, descubrirán que todo ese sufrimiento no ha sido más que la maniobra de una empresa extraterrestre para eliminar la vida en el planeta y así poder robar sus recursos naturales. Por desgracia para los alienígenas, los humanos supervivientes al virus desarrollan una capacidad extraordinaria frente al resto de habitantes de la galaxia. En el caso de Manuel, si toca a un alien, este muere al instante. Por su parte, cuando Lara entra en contacto con alguno le provoca un tremendo orgasmo.
La existencia misma de los dos humanos es un grave inconveniente para la corporación causante del genocidio quienes los perseguirán con intención de eliminar los cabos sueltos.
La única posibilidad de supervivencia es localizar a la Cabra Cósmica, auténtica creadora de toda vida en la Vía Láctea, para que interceda por ellos. De modo que, junto a un grupo de activistas que luchan contra este tipo de empresas, se embarcarán en una aventura frenética, llena de acción y humor en la que conocerán multitud de mundos y sociedades cada cual más peculiar que la anterior.
Se trata de una crítica social enmascarada en una novela de ciencia ficción futurista y post-apocalíptica. En la narración se exageran problemas existentes en la sociedad actual, como el machismo, la explotación indiscriminada de los recursos naturales o la industrialización del sexo, de manera que se extrapolan a un mundo mucho más grande que el nuestro.
