Este libro está dedicado a un personaje que conquistó un lugar de privilegio: un torero que se inició siendo un modestísimo torerillo de Triana para convertirse en el maestro más trascendental de la historia de la tauromaquia. Además, su excepcional personalidad le granjeó, como a pocos, eso que llaman "percha literaria" -en la que sólo se le acercan Ignacio Sánchez Mejías y Manolete-. Es lógico, pues, que se haya hablado y escrito muchísimo sobre Juan Belmonte –posiblemente más que de ningún otro torero-, y que ilustres escritores le hayan dedicado excelentes biografías: podríamos afirmar, sin temor a equivocarnos, que se ha dicho prácticamente todo de su vida y tauromaquia. Abordar una nueva biografía al uso no hubiera tenido sentido y por ello su autor parte de un momento crepuscular trascendental, el de su atardecer personal en su finca de Gómez Cardeña, para hilvanar una biografía comprensiva, llena de detalles íntimos y poco visitados, con la que entender mejor lo que más nos fascina de Belmonte, su enorme carácter; tanto para revolucionar el toreo como para llevar y abandonar una vida singular y fascinante. "¿Otro libro sobre Juan Belmonte?, podrá preguntarse algún posible lector. La respuesta es bien fácil: ¿por qué no? ¿No aparecen con cierta frecuencia libros sobre Beethoven, Picasso, Orson Welles o Velázquez? Lo lógico es que las figuras extraordinarias, esos que solemos llamar genios, sigan atrayendo la atención de los escritores y estudiosos... Este libro no es una hagiografía, pero Juan Belmonte era un artista genial y un ser humano fuera de lo común: vale la pena recorrer, a lo largo de estas páginas, su fascinante trayectoria... Mucho trabajo le costó a Juan Belmonte pero lo logró: no sólo fue un gran torero, supo ser una persona auténtica. El libro de Salvador Balil lo demuestra ampliamente." Andrés Amorós (Del prólogo a este libro.)